Cuando el hijo pequeño Kiran Bir Sethi estaba en la escuela, notó que sus maestros se apegaban rígidamente a los libros de texto y castigaban a los estudiantes que se desviaban del plan curricular establecido en India. Al darse cuenta de que los niños estaban siendo educados de la misma manera, fundó The Riverside School en Ahmedabad en 2001, con el objetivo de proporcionar un modelo alternativo que se centreba en la «calidad del aprendizaje», el «bienestar de los estudiantes» y «empatía en la educación».
Kiran Bir Sethi es diseñadora y experta en Design Thinking. Con ella surge, en 2009, Design for Change, presente en 60 países, atendiendo a más de 2,2 millones de niños y más de 65.000 educadores. Fue destacada como Ashoka Fellow en 2008 y ha recibido varios premios a nivel internacional. Design for Change está reconocida por la ONU como impulsora de los ODS. Design for Change desarrolló un proceso de diseño simple que permite a los niños convertirse en impulsores del cambio. Kiran señala que cuando las personas ven que se está haciendo algo bueno a su alrededor, puede tener un efecto pandémico. «Contagioso es una buena palabra», dijo Sethi durante de sus últimas charlas TED. «Me gusta la palabra. La risa es contagiosa. La pasión es contagiosa. La inspiración es contagiosa».
El Colegio Internacional SEK Catalunya ha llevado a cabo una serie de workshops bajo el título «Growing up empowered. An empowerment hub experience» en los que sus alumnos y han reflexionado y debatido con Kiran sobre lo que necesita el mundo. Quien animó a empoderarse, donde los jóvenes puedan alzar su voz.
Cuéntanos más sobre Riverside School en India
Bueno, la escuela de Riverside se estableció en 2001, por lo que es una escuela de 21 años y el principio organizador fundamental en la forma en que se administra Riverside es usar Design Thinking.
¿Cómo es el aprendizaje en Riverside?
Usamos el marco de Desing Thinking de Feel, Imagine, Do, Share para liberar a los niños para que actúen y para que resuelvan problemas, proyectos comunitarios y, sobre todo, para el aprendizaje. Entonces, a diferencia de que solo entiendan qué y cómo aprender, el enfoque real está en quién aprenderá y por qué. Entonces, si me pregunta cómo se ve el aprendizaje en Riverside, realmente está impulsado por un propósito, es un trabajo significativo con el que los niños se involucran y repetidamente se les recuerda que la razón por la que están aprendiendo, o siendo educados, o empoderados, es para que pueden hacer que el mundo sea un poco más justo y un poco más equitativo y esa es la verdadera razón para aprender.
Explícanos cómo el proceso educativo específico en la Escuela Riverside ayuda y empodera a los niños para formar «la buena vida»
Creo que gran parte del enfoque de la educación a menudo se ha centrado en las materias, los exámenes y las calificaciones y, a menudo, los niños se gradúan sin saber su propósito, sobre por qué, y cómo, ese aprendizaje se utilizará significativamente en la vida. Recuerdo cuando me gradué de mi escuela, hace muchos años, no tenía una conciencia real de quién era y qué papel podía desempeñar en el mundo. Y fue una lástima que muchos de nosotros tuviéramos esa misma experiencia, donde pasamos 15 años de nuestras vidas en un sistema escolar que despojó nuestra identidad, nuestra voz de lo que éramos. Entonces, creo que cuando comencé la escuela de Riverside en 2001 se convirtió en el único punto de enfoque. ¿Todos los niños pueden graduarse creyendo que no están desamparados, que el cambio es posible? La respuesta es sí y ellos pueden conducirlo. Entonces, si algo nos ha enseñado la COVID-19 es que, si bien podemos aprender cosas por nosotros mismos, solo podemos aprender unos de otros. Entonces, todo el enfoque del bienestar emocional y mental van de la mano. Por lo tanto, Riverside siempre se ha basado en la premisa de que nunca enseñaremos contenido o construiremos la personalidad, siempre serán ambas cosas.
¿Qué es Design for Change y qué es lo mejor del proyecto?
Design for Change nació en 2009 como una forma de tomar el mismo principio rector que estábamos usando en Riverside, que fue el Design Thinking, para ahora no solo servir a los niños de Riverside, sino también entender que todos los niños tienen derecho a creer que pueden hacer del mundo un lugar mejor. Y así, el marco Feel, Imagine, Do, Share, que llamamos «I Can Superhero Framework», se incluyó en un conjunto de herramientas simples y se lanzó en 2009 para que un niño en cualquier parte del mundo pueda usar estos mismos cuatro pasos para comprender que pueden cambiar su mundo. No estamos poniendo la carga de cambiar el mundo sobre nuestros hijos, sino dándoles la confianza de que, en su propio mundo, en el pequeño rincón del mundo que habitan, pueden tener las herramientas y las habilidades para hacerlo mejor. Y no necesitan permiso para hacer eso, y lo que es más importante, no deben tener 18 años o esperar hasta graduarse para ser agentes de cambio, pueden hacerlo hoy, donde sea que estén. Entonces, el marco simple Feel, Imagine, Share que ahora se usa en 60 países con más de 2.000.000 de niños, quienes tienen la confianza de poder identificar qué es lo que les molesta en su entorno, imaginar cómo sería el cambio, hacerlo con sus amigos, colegas y maestros, y luego compartir la historia para que puedan decirles a más niños que ellos también pueden hacer esto. Creo que esa es la belleza del Design for Change. Aún más importante, he sentido y he visto, que los adultos están cambiando la forma en que miran a los niños. Cuando ven a los niños ser agentes de cambio a los tres, cuatro, cinco, diez años, los miran con sorpresa y alegría para decir: «Wow, así de increíbles son los niños». Entonces, está funcionando tanto para los niños, que les está ayudando a creer en sí mismos, y también para los adultos, que miran a los niños y creen en los niños. Creo que eso es lo más maravilloso del Design for Change.
¿Cómo desarrolló la idea del empoderamiento como catalizador del cambio? ¿Qué te inspiró a tomar estas ideas y enfocarte en los niños?
Creo que surgió de mi trabajo en Riverside y también del Design Thinking. Soy diseñadora de profesión, así que usé mi educación en diseño para volver a poner el diseño en la educación. Creo que la única pieza que a menudo se pierde en la mayoría de las escuelas es la voz del niño como cocreador, como codiseñador de su viaje de aprendizaje, por lo que a menudo diseñamos para niños y nunca con niños. Entonces, como diseñadora cuando comencé en Riverside y comencé a invitar la voz del niño como un socio igualitario en la toma de decisiones, era tan evidente que esto estaba generando cambios y empoderamiento en el sistema de creencias del niño. Entonces, siento que esa idea de empoderamiento, simplemente se reforzó y volvió a enfatizar cada año y cada día cuando comenzamos a ver a los niños convertirse en esos agentes de cambio confiados. Creo que para mí eso es lo que inspiró a tomar el diseño para el cambio y con el trabajo que estamos haciendo ahora transformando escuelas, ahora son escuelas «I Can».
¿En qué momento te diste cuenta de que la educación debe extenderse más allá del aula?
Desde el primer momento, desde el primer día. No creo que la educación se haya limitado alguna vez al aula y no creo que nunca hayamos visto el aula como un límite para el aprendizaje. Entonces, el aula se convirtió en un área más para aprender, si es que queríamos quedarnos en el aula alguna vez. Todo el esfuerzo se debe centrar en reducir tantos límites como sea posible. Los límites internos se redujeron y disolvieron porque estaban trabajando juntos, estaban trabajando entre ellos, tenían que comprometerse con su propia comunidad. Y los límites externos de la vida y el aprendizaje se disolvieron porque nuestros hijos estarían en la ciudad, en el entorno, en la comunidad... Comprendiendo realmente que cualquier cosa que pensaran que estaban aprendiendo debía tener sentido, ya fuera escribiendo, por ejemplo, cuando los niños más pequeños estaban aprendiendo idiomas, entendían y dominaban las habilidades de lectura, escritura, escucha, tenían que aplicarlo en el mundo.
¿Qué pueden hacer los docentes para verse más motivados?
Esa es una pregunta difícil, pero creo que los maestros deben escuchar más en lugar de decir más. Cuando comenzamos a escuchar, a menudo nos sorprende y nos encanta lo que hacen nuestros niños. Creo que es una gran motivación, porque cuando estás escuchando a alguien y realmente estás interesado en alguien, genera una profunda sensación de confianza y esa relación es realmente el corazón de lo que comparten un maestro y un estudiante. Hay que reconocer también que no tienen que ser docentes todo el tiempo, y que esa relación se trata de aprender juntos, cuando los docentes eliminan el papel que desempeñan, pero entienden la responsabilidad que tienen, cambia la forma en que los docentes se involucran en ese espacio. Diría que sí, escuchar más, reír más, abrazar a los niños, quiero decir, por supuesto, siento que es muy importante tener conversaciones con los niños en lugar de más instrucción. Creo que los maestros se sorprenderán de lo maravilloso que puede ser.
En muchas ocasiones los maestros se sienten muy presionados por enseñar según los estándares y para mejorar los resultados en las pruebas estandarizadas. ¿Cómo se ajusta la enseñanza diferenciada en ese contexto?
De nuevo, volviendo al comentario anterior que hice sobre escuchar y comprender su responsabilidad y su función. Ahora, y tras la COVID-19, creo que gran parte del contenido puede cubrirse con otros métodos. Ya sean programas en línea, videos, piezas pequeñas, aplicaciones... Ahora los niños tienen una variedad de formas en las que pueden aprender o estudiar el contenido. Eso está ahí, y todos lo sabemos, y en todo caso, la COVID-19 ha reforzado que aprender el contenido lo puede hacer uno mismo y con bastante facilidad. Yo creo que es todo en lo que los docentes tienen que estar enfocados, que es el bienestar social y emocional, las conversaciones, el corazón del niño, entender cómo se sienten los niños porque solo así podrán archivar mejor la información. Pero si lo negamos y decimos que no, no, tenemos que preocuparnos por la brecha de aprendizaje... Mientras están en la clase, no necesariamente están presentes, porque no se sienten preparados para aprender, se sienten heridos emocionalmente, y esa curación es realmente lo que es tan importante. Ser capaz de lograr que los niños entiendan su corazón primero, porque el corazón los conduciría a la mente. Aprender sobre sí mismos, aprender a entender cómo ser fuerte, ser genial, ser empático, ese es realmente el plan de estudios más grande.
«Ahora, y tras la COVID-19, creo que gran parte del contenido puede cubrirse con otros métodos. Ya sean programas en línea, videos, piezas pequeñas, aplicaciones... Ahora los niños tienen una variedad de formas en las que pueden aprender o estudiar»
¿Qué te alienta e inspira a crear desafíos más grandes para tu escuela y expandir los programas de divulgación en todo el mundo?
Creo que no hay nada que me anime, simplemente es la forma más obvia en que los niños deben aprender a entender que ellos viven en este mundo. Para nosotros como equipo, estamos constantemente en busca de oportunidades, ya sea desde nuestro propio organismo matriz, de la red que tenemos o desde la ciudad. En ningún momento los niños pasarán más del 40% en el ambiente escolar, siempre están pasando tiempo al aire libre, ya sea haciendo obras de teatro en la calle, haciendo proyectos con clientes, ya sea trabajando con el municipio, la policía... Estamos constantemente participando en la red de la ciudad y ésta realmente se convierte en el espacio de aprendizaje, por lo que ahora se convierte en parte integral del programa. Asimismo, con Design for Change y con el otro programa que comencé, que es hacer que las ciudades sean amigables para los niños, éstos tuvieron muchas más oportunidades. Sigo pensando que las escuelas deben convertirse en faros de esperanza, y las escuelas deben recordar que no solo son lugares transaccionales, donde trabajarán con niños que vienen solo a su escuela, sino que pueden trabajar con toda la comunidad. Una vez que abres la escuela como un lugar para la comunidad, se vuelve más rica para tus propios hijos. Animaría a las escuelas a expandir realmente la noción de que el aprendizaje está más allá de los límites de las aulas.
Tus iniciativas se consideran inspiradoras debido a tu percepción de que las palabras «Yo puedo» pueden cambiar el mundo de un niño. En este punto, ¿las escuelas ponen barreras?
Diría que se ha vuelto más fácil, en realidad se volvió mucho más fácil justo antes de la COVID-19. Creo que estábamos consiguiendo un cambio al decir que sí, hay muchos más requisitos para que los niños se empoderen y se conviertan en ciudadanos del mundo, lo que ahora llamamos ciudadanos globales, pero la COVID-19 ha sido un obstáculo. Pero lo que también se ha convertido en una gran oportunidad es la necesidad de que los niños estén comprometidos. Confío en que avanzar en más y más educación, y más y más aprendizaje, se traducirá en más empoderamiento y creo que eso es emocionante.
Con respecto al futuro, ¿podrías augurar cómo será la educación el día de mañana?
Oh, Dios mío, si pudiera hacer eso, sería la reina del mundo. Creo que la interrupción en la forma de entender el tiempo y el espacio, creo que definitivamente veremos más, creo que la COVID-19 nos dio confianza para entender el tiempo. Ese tiempo, de repente, se convirtió en un aliado, e incluso el espacio físico que limitaba el aprendizaje, también puede ser reimaginado. Lo vimos con la COVID-19, ahora, tal vez, en el futuro veremos mucho más tiempo y espacio cuestionados, reimaginados, observados, pero creo que el enfoque también estará más en el empoderamiento. Habrá más empatía, más comunidad global y, por tanto, debemos mirar diferentes formas en las que entendemos quiénes somos. No solo en nuestras propias ciudades y nuestros propios países, sino como humanidad. Creo que una visión un poco más amplia de nosotros como raza humana o una raza más humana sería algo que siento en lo que podríamos avanzar.
¿Qué nos permitirá conocer sobre el aprendizaje la inmensa acumulación de datos generados en la experiencia educativa virtual?
Durante la pandemia, lo único que creo que todos aprendimos es que la escuela debería ser el último lugar en cerrar. Creo que debemos entender que cuando los niños tienen miedo y están ansiosos, no aprenden. Durante la crisis sanitaria fue la primera vez que nuestros hijos estaban siendo testigos de un mundo que se les decía que amar a alguien era tener miedo de ellos. Y ahora tenemos que volver a escribir todo ese sistema de creencias. Debemos decir sé valiente de nuevo. Entonces, cuando las escuelas cerraron, básicamente las convertimos en nuestra última prioridad. Nuestros niños siempre deben ser nuestra primera prioridad y los resultados finales de nuestros estudios también nos dicen eso.
«Durante la pandemia, lo único que creo que todos aprendimos es que la escuela debería ser el último lugar en cerrar. Creo que debemos entender que cuando los niños tienen miedo y están ansiosos, no aprenden»
El pensamiento de diseño innovador está transformando el sistema educativo, tal como lo conocemos. Los niños están agregando valor estratégico a su educación y están logrando un cambio social significativo en sus comunidades. ¿Cómo pueden los niños hacer estas cosas y cómo transforman de manera única el proceso educativo a medida que crecen y aprenden?
La idea de que cuando los niños entienden que son capaces, confiados y empoderados, todo se vuelve mejor para ellos. No solo se desacredita por completo el enfoque o el cambio que supone el aprendizaje centrado en las calificaciones o solo en el examen. Eso es realmente el corazón del aprendizaje empoderado. Todo lo que hacemos tiene un significado y un propósito, y ese propósito es hacer algo mejor, para mí y para mi comunidad inmediata. Eso solo puede servir bien a nuestros hijos cuando se gradúen, y vayan a las ciudades y al mundo y comiencen a reconocer que el mundo no es para aprovecharnos de él, sino para dejar nuestra riqueza. El Design Thinking realmente les ofrece a los niños un marco para hacer eso. Siempre comenzará con empatía (sentir), siempre será creativo y exploratorio (imaginar), luego siempre podemos poner eso en acción porque hemos entendido al usuario y la necesidad, y luego, por supuesto, podemos compartir estas historias para inspirar para inundar realmente el mundo con inspiración y alegría.
¿Qué valores, conocimientos, destrezas o habilidades deberían tener los estudiantes al finalizar su etapa formativa para poder hablar de un sistema educativo adecuado?
Los sistemas de creencias realmente definirán las habilidades. Muy a menudo tenemos habilidades del siglo XXI pero todavía tenemos sistemas de creencias del siglo XX. Si podemos igualar esa primera y principal parte de la raza humana, y eso se convierte en una identidad fundamental, entonces todo nuestro conjunto de habilidades sirve y promueve la causa de la humanidad.
A lo largo de los años, has recibido numerosos galardones, ¿de cuál estás más orgullosa?
Me encanta que siempre me llamen la mejor madre, lo que creo que soy, y creo que mis hijos me siguen diciendo que ese es el único papel que hago. Ser la mejor madre del mundo creo que es mi mayor logro. Sigo diciendo que las recompensas son muy aleccionadoras, pero son muy útiles porque simplemente abrieron más puertas. Por tanto, las recompensas son gratificantes solo porque abres más puertas, y esas oportunidades se abren para ti, y tienes para seguir haciendo lo correcto por ellos.